20 Mitos sobre nutrición (3)
20 Mitos sobre nutrición (3)
Texto:
http://cocinacondanni.com/2013/02/06/10-mitos-sobre-la-alimentacion/
10 Mitos sobre nutrición
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Se hablan tantas cosas sobre la comida, que muchas veces acabamos sumergidos
en un mar de dudas sobre que será verdad y que no, acerca de todo lo que
vemos, escuchamos y leemos.
Este artículo quizá te ayude a resolver alguna de esas dudas que surgen a
diario sobre nuestra alimentación y los productos que consumimos.
1.- Los huevos morenos son más nutritivos que los blancos.
Falso, el color
de los huevos no tiene nada que ver con lo nutritivo que resulten, pues el
color depende únicamente de la raza de las gallinas.
2.- El teflón es cancerígeno.
Verdadero y falso. Lo que se sabe hasta ahora
es que el teflón, a partir de los 370 grados, libera hasta 15 gases tóxicos,
de los cuales dos son de naturaleza cancerígena. ¿Alguien pone la sartén a
esa temperatura? … ante la duda se pueden tomar ciertas precauciones, como
ventilar la cocina, descartar las sartenes que tengan el esmalte
deteriorado, rayado, gastado o quemado y evitar dejar la sartén de teflón al
fuego por mucho tiempo.
3.- La sal engorda.
Falso. La sal no engorda, porque, al igual que las
vitaminas y los minerales, no aporta calorías. Pero sí es verdad que
favorece la retención de líquidos.
4.-La fruta engorda más si se come como postre.
Falso. Como cualquier otro
alimento, la fruta engorda sólo si se come en exceso. Por tanto, puede
ingerirse en cualquier momento del día. Es más, hoy sabemos que la vitamina
C que contiene la fruta permite, al ser comida como postre, una mayor
absorción del hierro que provee un plato de carne.
5.- El chocolate causa acné.
Falso. Si alguna vez el dermatólogo le dijo que
su acné se debe a la ingesta de cacao, tome la tarjeta con el número del
médico y arrójela a la trituradora de papel sin remordimiento. No existe
evidencia de que el chocolate, el azúcar, el aceite, las semillas, la leche
o cualquier otro alimento, causen acné. Éste tiene múltiples orígenes
hormonas, bacterias, predisposición genética, estrés, ninguno de ellos
relacionado específicamente con el chocolate.
6.- Si congelas las verduras estas pierden sus propiedades.
Falso. Comer
verduras congeladas es una buena forma de consumir aquellas de “temporada”,
puesto que se recolectan en su mejor momento nutritivo. Es cierto que su
textura y color se ven afectadas, pero no así su valor nutritivo, que se
mantiene prácticamente igual al de las frescas.
7.- Los cítricos no dañan los dientes.
Falso. El limón y la naranja
debilitan el esmalte de los dientes facilitando que tomen un ligero color
amarillento. Es mejor no morderlas directamente sino cortadas en pedazos o
en zumos.
8.- La carne de cerdo tiene mucha grasa.
Falso. Debido a que 65% de la grasa
que contiene el cerdo se retira durante el proceso de corte. De la que
queda, 70% es poliinsaturada (de la buena) y sólo el 30% es saturada (la
mala).
Además, la cantidad de colesterol en el cerdo es igual o menor que en otras
carnes; es rica en ácido linoleico, el cual neutraliza los efectos negativos
de las grasas saturadas.
9.- Si el agua se toma durante la comida, engorda. Falso.
El agua no aporta
calorías. Por lo tanto, no engorda aunque se tome antes, durante o después
de las comidas. Si bebes agua antes de comer te aporta sensación de
saciedad, lo que te ayuda a calmar el apetito y a moderar más lo que comes.
10.-La fruta enlatada no es saludable.
Falso. Da igual la forma en la que esté envasada, la fruta siempre es fruta.
Fresca, congelada o enlatada, una pera o una manzana conservan intactas sus
vitaminas y propiedades.
En general, la fruta congelada o en conserva suele ser más barata, con lo
que, además de nutrir a tu familia, te pueden servir para ahorrar unos
cuantos euros a final de mes.
Los productos enlatados generan desconfianza en los consumidores, ya que
creen que los alimentos pierden su valor nutritivo. Sin embargo, esta fruta
es tan nutritiva como la natural, y generalmente mucho más económica.
Texto: http://marielapreescolar.blogspot.com
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Alimentados por el folclore urbano, los 10 Mitos sobre nutrición crecen.
Muchos de ellos parten de un hecho real que se ha exagerado o distorsionado
hasta conseguir un lugar inamovible en el imaginario popular. Estos son
algunos de los más extendidos.
1.
Los huevos pardos son más nutritivos que los blancos.
Es falso, el color de
los huevos depende únicamente de la raza de las gallinas.
2.
El azúcar moreno es más sano que el blanco.
El moreno es mezcla de azúcar
refinado y melaza (más oscuro cuanto más haya). Esta última aporta algunos
minerales pero para que se notase realmente el efecto habría que comer
grandes cantidades.
3.
Existen alimentos que queman grasa.
Falso. La única manera de perder peso es
controlar las calorías y realizar actividad física regularmente.
4.
El jamón serrano o ibérico es más nutritivo que el cocido.
Esto si es
cierto, al jamón cocido se le agrega aditivos para aumentar el peso del
producto.
5.
Los productos light no engordan.
Depende de la legislación alimentaria de
cada país. En España sí, ya que se llama light a los productos con un menor
aporte energético o de calorías que otro producto de referencia.
6.
No es bueno cocinar con vino.
Totalmente falso. El vino realza el sabor de
las comidas y permite utilizar menos sal. Por otra parte, el alcohol se
evapora durante la cocción.
7.
Una copa de vino diaria disminuye el riesgo de infarto.
El efecto
beneficioso del vino sobre la salud es conocido desde hace mucho tiempo. Las
antocianinas elevan el colesterol bueno, reduciendo el riesgo de sufrir
cardiopatías.
8.
El consumo de sacarina produce cáncer.
En 1977, un estudio demostró que un
consumo excesivo causaba tumores de vejiga en ratas. Lo que ocurre es que la
dosis que ingirieron los animales sería el equivalente en humanos a tomar
10000 pastillas de sacarina diarias durante el resto de nuestra vida.
9.
Comer ajo crudo mejora la circulación sanguínea.
Cierto, contiene sustancias
como la aliína que relajan los vasos sanguíneos, aumentando el flujo de
sangre y previendo la formación de coágulos. Esto lo dice hasta la
Universidad de Alabama, que queda como muy bien aunque no estamos muy
seguros de donde está.
10.
Después de comer hay que esperar dos horas antes de meterse al agua.
Depende
de lo vacaburra/o que te hayas puesto. Si tras el menú judías, asado de
carne y pastel decides darte un baño puedes sufrir desde una indigestión
hasta llegar a perder el conocimiento. Con comidas ligeras no hay tantos
problemas.